"Las redes sociales se han transformado en el nuevo espacio público del mundo árabe dice González-Quijano. Los testimonios de blogueros y analistas así lo confirman. Facilitan además la independencia y la autonomía de las personas y ofrecen una alternativa a los espacios tradicionales de los partidos políticos especialmente denostados en numerosos países árabes por su excesiva proximidad con el poder. Para los jóvenes ha sido sin duda un espacio para poder respirar".
"En el caso de la revuelta de Egipto fue el ejemplo de Túnez sumado a una utilización estratégica de las redes sociales durante las revueltas. Los manifestantes de la plaza Tahrir cuenta Sofiène tuvieron que aprender a utilizar Twitter para eludir los controles policiales que pretendían impedirles las manifestaciones".
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